Recientemente, nuestro equipo ha finalizado el proyecto que nos encargó el Archivo Diocesano de Lugo. Este proceso consiste en la limpieza, clasificación y descripción de una parte de su fondo de Órdenes Sagradas, con el objetivo de posteriormente incluir dicho trabajo en PARES (Portal de Archivos Españoles). La tipología de la documentación con la que nos hemos encontrado es diversa y la podemos clasificar en tres grandes grupos: los expedientes de los pretendientes a órdenes religiosas; letras dimisorias; lista de ordenados y matrículas; y los breves. En este artículo vamos a hacer referencia a los breves y a como se sellaban con el anillo pescador.
¿Qué son los breves?
Los breves son documentos emitidos por el Papa, redactados de forma menos solemne que las bulas. Es uno de los tipos de documento pontificio más abundante. Tipológicamente se caracterizan por estar encabezados por la abreviatura de papa “P.P.” seguido por el nombre de este y su correspondiente ordinal, por comenzar el texto con la fórmula “dialecto fili” y por terminar con la validación “sub annulo piscatoris” (sellado con el anillo del pescador).
Durante este proyecto, nos encontramos con varios breves emitidos por el Papa Benedicto XIV (1675-1758). Este tipo de documentación estaba sellada, como hemos dicho anteriormente, con un anillo especial de oro, que recibe el nombre de “anillo del pescador”.
Anillo de pescador
El anillo de pescador, diferente para cada pontífice, debe su nombre a San Pedro, el cual aparece representado en el pescando desde una barca, trabajo al que se dedicaba antes de convertirse en apóstol.
La entrega del anillo, que es diferente para cada papa, se produce en el momento en el que es elegido el nuevo pontífice. El encargado de colocarle el anillo será el decano del Colegio Cardenalicio. Una vez colocado, el papa deberá llevarlo siempre salvo en Viernes Santo y cuando oficie Misa de Exequias. A la muerte del papa, el camaralengo debe destruir el anillo para lo cual empleará un martillo de plata. Los restos del anillo no son eliminados, sino que serán utilizados para crear el anillo del nuevo pontífice.
De forma anecdótica podemos señalar que la ceremonia de la destrucción del “anillo del pescador” aparece representada tanto en el libro de Dan Brown “Ángeles y demonios” (2000), como en la película con el mismo nombre (2009):
“Según la tradición vaticana, después de la muerte del Papa el camarlengo había confirmado en persona el fallecimiento apoyando dos dedos sobre la arteria carótida del pontífice y luego pronunció en voz alta el nombre del finado sucesor de Pedro tres veces. Por ley, no se practicaba autopsia. Después, había sellado el dormitorio del Papa, destruido el anillo papal del pescador, despedazado el cuño utilizado para hacer sellos de plomo y efectuado los preparativos del funeral”. Fragmento de la obra de Dan Brawn “Ángeles y demonios” (2000).